1
Cortar las zanahorias al medio a lo largo. Deben quedar unos bastones de unos 6 cm. de largo y 1 cm. de ancho. En caso que las zanahorias sean un poco más grandes, cortarlas en cuartos.
2
Cocinar al vapor, hasta que estén al dente. O sea, tiernas pero aún firmes en el centro, ya que tendrán una segunda cocción. De lo contrario se quebraran. Dejar enfriar.
3
Mezclar el pan rallado con las hierbas picadas.
4
Pasar las zanahorias por el huevo, apenas batido condimentado con sal y pimienta, y luego por el pan.
5
Calentar una placa, rociar con un poco de aceite de maíz o girasol y luego cocinar las zanahorias hasta dorar, en un horno medio (180º).